LA ENFERMERÍA REZAGADA.

Una reflexión que descubre varias verdades.

El trabajo de cada uno siempre es un aporte a la sociedad. Cada tornillo desempeña su papel en esta maquinaria de producir y vivir. Y dentro de cada sector o profesión, existe la oferta y la demanda.

LA PROFESIÓN DE ENFERMERA, siempre ha sido, quizás por la extrema importancia de su accionar, muy requerida.
Y hoy, en la Argentina hay una falta de 90.000 enfermeras, contra un exceso de médicos. Según informes, hay una enfermera cada cuatro médicos, cuando según las recomendaciones del Banco Mundial debería ser al revés.

Por cada cinco médicos que egresan al año, se recibe un solo enfermero, que obtendrá alrededor de seis a siete mil peso  como ingreso mensual promedio, pasando en su momento por un filtro conocido como BECARIO, que de aprendizaje no tiene nada.

Cuando pasen los años, ese tiempo quedará en blanco a la hora de jubilarse como ocurrió en la década del noventa del siglo pasado.

LA VIDA ES UNA FOTOCOPIA.

Hay 83 mil profesionales en el país y mientras la Capital tiene 6.000 cargos sin cubrir, en los hospitales bonaerenses se necesitan al menos 4.000 enfermeros, de acuerdo con datos del Observatorio de Recursos Humanos de la provincia de Buenos Aires.

Tan sólo 1.000 licenciados en enfermería egresan por año de todas las universidades del país, mientras que alrededor de 5.000 médicos se suman anualmente al mercado de trabajo, una relación que agravará el faltante de enfermeras en los próximos años.

Mientras los magros salarios hacen que los Enfermeros trabajen en otras instituciones, hipotecando su hogar, para poder alimentar, vestir y educar a los hijos.

Los Maestros aprietan, los camioneros amenazan, los mineros protestan, y así muchos más---LOS ENFERMEROS SON LOS ÚNICO QUE ESTÁN OBLIGADOS EN CALLAR.

Cuando intenté organizar la Enfermería, a pesar de tener una gran adhesión, me petardearon desde afuera y desde adentro y me terminaron torciéndome el brazo. Me quedé solo, colgado de una palmera.

--- Quizá mi incapacidad de liderazgo, me llevó al fracaso…

A todo aquel que intente un cambio en esta profesión le deseo todo el éxito del mundo. Sin embargo, mientras el Estado  no le reconozca a los ENEFERMEROS, sus  derechos  a legitimar la profesión, la cosa seguirá harto difícil, por las limitaciones laborales que tiene la ENFERMERÍA, para poder manifestarse públicamente.

La POLICÍA, junto a los Enfermería, la otra profesión que no puede sindicalizarse, intentó   levantarse contra un sistema perverso, que le exige mucho y le da poco.  Todo terminó con el descabezamiento de sus organizadores. Algo similar sucedió con la GENDARMERÍA.

---- Los medios de comunicación se olvidaron del asunto como si fuera algo obsoleto. Algo similar ocurre con los Partidos Políticos, que consideran que es un tema que tiene mucho lastre y no se animan a prometer, porque muy pocos cumplen los que prometen.

Reconozco que hay ENFERMEROS que no se sienten molestos con la paga, pero esto tiene que ver con su escasa solidaridad con el resto de   sus colegas, o por su falta de identificación con la profesión.

El actual Gobernador bonaerense, reconoció que fueron ENFERMEROS que le salvaron la vida, cuando tuvo aquel accidente náutico que le costó un brazo. Sin embargo,,  en su plataforma política en pos de la Presidencia, la Salud tiene poco espacio, y la Enfermería es una entelequia.