HAY QUE DESCONFIAR DE TODO Y DE TODOS.

  

UN MOMENTO DE REFLEXIÓN.

 Ver que   al radical SANZ  reuniéndose con Sciooli  o en uno de los hoteles del Lázaro Báez marplatense es no conocer la realidad de esta ciudad, por lo tanto no merece la confianza de nadie.

Si el radical Sanz puede mirar con ojos impávidos como Scioli, se tira la plata del erario, para una bochornosa promoción de su candidatura presidencial, es no conocer la realidad bonaerense y, por lo tanto no merce la confianza de esta provincia.

Si Sanz ve la situación de la Educación y de la Salud en la provincia de Buenos Aires, se dará cuenta donde no están las prioridades de Scioli.

No se puede creer  que en el Municipio de la Costa no haya un Hospital de alta complejidad, mientras se lo abarrota al Pediátrico marplatense.

Los gobernantes están acostumbrados al monólogo, por eso creen que todos los ciudadanos se tragan sus sapos.

Antes de hablar de crisis sería saludable para las arcas de la Provincia,  que todos los que se enriquecen a costilla del Estado bonaerense, y aquellos que   gambetean   los impuestos, que paguen y nunca habrá déficit presupuestario.

Basta de correr a los perejiles, y hacerse los distraídos con los amiguitos como el Lázaro Baez marplatense (ALDREY IGLESIAS), denunciado de pagar migajas por todos los bienes que acumula.

LA VIDA ES UNA FOTOCOPIA. Y CFK., no es culpable de todo…gobierna en país de argentinos.

EL EXECRABLE ROSTRO DE LOS POLÍTICOS.

Se muestran en las mejores playas del país y del exterior. Viven en una opulencia que da asco, porque es sabido que no es dinero del esfuerzo sino obtenida de las mamaderas del Estado.

Cuando cambian de mujeres, las visten de reinas, por más que sean meras plebeyas. La guita es lo de menos.

Los sindicalistas se muestran más recatados que en la época menemista donde hubo personaje, como el dirigente de los Empleados de Comercio,  que no tuvo ningún empacho de mostrarse en el Caribe, mientras muchísimos afiliados de su Gremio, no podían ni siquiera veranear en la vereda de sus casas.

El escritor español  Arturo Pérez-Reverte es bastante crítico con respecto a la política,  ya que encuentra que esta es siempre la misma, sin importar quién sea el que represente al país, sea este de derecha o izquierda, liberal o conservador. El siente que la política no sirve como sistema, puesto que lo que prometen los políticos casi nunca o nunca lo cumplen, dejando que muchos estén descontentos o disgustados.

Son millones los argentinos que viven de una miserable jubilación, son diputados y senadores que no aciertan en abrir la boca en defensa del pasivo. Total que carajo les importa la gente.

Son los mismos políticos con aspiraciones presidenciales que nunca movieron un dedo a favor del  jubilado.

A ninguno de ellos le importa como tampoco a la JUSTICIA, solamente preocupada que no pagar impuestos y seguir recibiendo jubilación de privilegio.

Dos abominables del pasado reciente el expresidente Carlos Menem y su  ministro de economía Domingo Cavallo, se distrajeron viendo la lucha que a favor del jubilado llevó a cabo  Norma Beatriz Guimil de Plá, cuya gratificación final fue morirse de un cáncer de mama.

--- Es evidente que al pueblo argentino los gobierna una caterva de personajes,  cuya identidad política siempre está en duda, porque la ideología pasa por la corrupción. Total jurar por Dios y por la Patria es apenas  un detalle que no merece la mayor consideración.