lunes, 20 de mayo de 2013

Máxima muestra la hilacha.

Al parecer Máxima, la reina consorte de Holanda y su marido están mostrando la hilacha. Mejor dicho: la han vuelto a mostrar. Sólo es cuestión de recordar. Cuando todavía no se les había subido el trono a la cabeza se habían mandado una cuando construyeron en Mozambique un Palacete a espaldas del Parlamento. Cuando los legisladores se enteraron les obligaron a deshacerse del inmueble. A nadie se lo ocurrió averiguar cuáles son los bienes que tienen en la Argentina. Qué propiedades tienen en el Sur del país. Es cuestión de ponerle el ojo al asunto y seguro que salta la liebre. No hay que olvidar que Máxima es argentina y su marido, un pavote, dominado por su mujer. Si no me creen mírenle la cara que tiene. Si este tipo hubiese sido el común de los mortales sin tantos pergaminos de vago con suerte, no le daría bolilla ni la más tirada solterona. Repitiendo algo que ya había sido publicado pero que el Parlamento holandés le llevó tiempo enterarse es que la pareja había adquirido una casa de veraneo en Grecia que vale nada más ni nada menos que cuatro millones y medio de euros. Parece que Guillermito no se ha enterado que Europa está en crisis y que Holanda no escapa a las generales de la ley. O quizá tiene miedo descubrir que su mujer se casó con él por interés y si no le da todos los gustos lo deje. Los reyes, según se supo, querían ser vecinos del tirano ruso Vladimir Putin. La diferencia que en Holanda existe la libertad absoluta y no el libertinaje como en la Argentina y en Rusia. La opinión pública de los Países Bajos se está enterando quienes son este par de vivillos. La Vida es una Fotocopia. saulrabin@gmail.com