domingo, 21 de diciembre de 2014

LA CORRUPCIÓN DA VIDA A LA POLÍTICA.


Por más que juren por Dios y por la Patria, los políticos no creen  en lo que prometen, por eso son tan olvidadizos. Total los votos  se pueden comprar o vender, de acuerdo la ocasión.
 “Los ciudadanos de las Américas tienden a percibir altos niveles de corrupción en sus respectivos países.  La Argentina se ubica entre los países con promedio más alto, junto con Colombia (al tope de la lista), Trinidad & Tobago, Guyana y México.
Sorprende la posición comparativamente baja ocupada por Brasil habida cuenta de la ola de escándalos de corrupción que afectó al nuevo gobierno del Partido de los Trabajadores.”
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La corrupción no es una práctica aislada  sino un baile  que requiere inexorablemente de dos actores. Hay quien opina que es un acto consentido, y quien cree que una de las partes fuerza a la otra a danzar porque tiene el poder de la concesión pública en sus manos.  
Expertos urgen a buscar soluciones ya que la corrupción tiene graves consecuencias para la economía de un país al poner trabas a la competencia, impedir el desarrollo de empresas más competitivas, frenar la llegada de capital extranjero y socavar recursos públicos.
La corrupción   en mercados como el ANGLOSAJÓN hay una actitud mucho más decidida a combatir esta  práctica. La considera   una lacra para la sociedad.
“Genera desigualdades e inseguridad jurídica y hace que aumenten los costes porque hay que pagar más para conseguir lo mismo”, advierte Ignasi Carreras, director del Instituto de Innovación Social de la Esade (Universidad, catalana).
“Es fácil mirar para otro lado y decir que no hay corrupción o adoptar una actitud victimista y pensar que si yo no entro en el juego no voy a crecer. Es un error. Cuando actúas así debilitas a tu empresa porque desincentivas el esfuerzo. El dinero que usas para lograr contratos se lo quitas a áreas como la de investigación”, señala Daniel Truran, profesor de la Escuela de Organización Industrial española.

Recientemente en medio de las diatribas lanzadas contra el Gobierno nacional, los  empresarios reunidos por IDEA (Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina) en Mar del Plata   participaron de un panel interactivo sobre valores y democracia en el que se planteó la siguiente pregunta: "Si un acto de corrupción está destinado a obtener una aprobación (por ejemplo, una habilitación municipal) maliciosamente retenida, ¿es censurable la actitud del empresario?"

Muchos, pero sobre todo los periodistas especializados y analistas presentes, se sorprendieron ante el resultado: el 53 por ciento dijo que "siempre" es condenable semejan te práctica, pero un 47 por ciento se decidió por avalarlo: 28 por ciento hacerlo "sólo en casos extremos" y 18 por ciento "nunca" condenarlo.

Según el diario La Nación, minutos antes el ciento por ciento de los participantes del panel interactivo se había pronunciado por cohesionar el país "por sus valores"... Al parecer, esos "valores" son diferentes para estos megaempresarios que para la gran mayoría de los humildes ciudadanos argentinos.

Recientemente el PAPA FRANCISCO ocupó una vez más parte de su misa diaria en Santa Marta para referirse a los casos de corrupción que han ensombrecido a la Iglesia. "Tantos escándalos que no quiero mencionar singularmente, pero todos lo sabemos. Sabemos dónde están. Escándalos, algunos que hicieron pagar tanto dinero, está bien. Se debe hacer así. ­¡La vergüenza de la Iglesia!", dijo el Pontífice.

 Digno de un chirolita, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, afirmó hoy que el MENSAJE DE NAVIDAD difundido ayer por la Iglesia Católica “en realidad hace referencia a la corrupción privada” y a continuación consideró que la prensa “pretende instalar la responsabilidad en el gobierno y eludir su propia responsabilidad.”
“La preocupación por la corrupción tiene que ver con la corrupción privada, pero siempre los medios de comunicación pretenden instalar la responsabilidad en el gobierno, y tratan de eludir su propia responsabilidad”, dijo el gobernador del Chaco en uso de licencia.
Como mentir es políticamente correcto, el funcionario kirchnerista olvidó decir que en materia de putrefacción moral el Estado es parte del mismo.
El Río de la Plata ya mostró sus garras, desde sus comienzos, y no hubo razón alguna para que algo cambiara. Esto seguirá así más allá del 2015, y por más brindis que se hagan por un país mejor.

La Vida es una Fotocopia.

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