martes, 17 de febrero de 2015

LOS EMBUSTEROS DE SIEMPRE.



 La vida es una fotocopia.

Me embarga una infinita congoja porque me   doy cuenta que en esta vida, y en este país, el hombre tiene menos valor que el cero. A nadie le importa el  prójimo.
Desde que  el benemérito federal Juan Manuel de Rosas, continuó con  el Holocausto de nuestros nativos durante  la  Campaña del Desierto de  1833,    el Poder Central siempre  mantuvo una llamativa indiferencia hacia los aborígenes, contagiando a los gobernantes de las distintas provincias, quienes se mostraron decididos a  exterminar   a esa  gente mediante  todo tipo de pogromos.

YO EN MI BLOG: el rincondelosimpios.blogspot.com comenté  lo que pasaba con los Wichis, en la localidad salteña de General Enrique Mosconi (Departamento General José de San Martín): “una comunidad fantasma después que la maldita onda privatizadora arrasara  con todo aquello que valía dejando tras de sí hambre y  miseria.
Los jóvenes huyeron y los mayores se quedaron rezando.
Hay una sobreabundancia de iglesias y santos, pero falta gente piadosa.
En el cotilleo pueblerino de Mosconi se pueden oír    historias sobre la presencia de  extraños inversores quienes,  por la fuerza,  han arrojado de sus  tierras a sus verdaderos  dueños en   aras de la benemérita SOJA.

Hay quienes   nombran, entre otros,  al pretendiente a la Presidencia de la Nación, el ingeniero Mauricio Macri como a un fanático sojero.
Hoy por las calles de Mosconi se ven a los originarios de esta comarca convertidos en pordioseros. Y a  sus hijas adolescentes prostituyéndose para poder alimentar a sus familias.
Wichis están condenados a su extinción física. Moral y culturalmente hace siglos que han  sido avasallados.
Por eso, si alguien quiere saber si en la Argentina existen excluidos, que  visite Gral. Mosconi.

Todo lo que le sucede los WICHIS, no es algo que tiene que ver con su destino. La política los envilece.
El  intendente de Mosconi, Isidro Ruarte,  perteneciente al partido Renovador, fue reelecto en su cargo mediante la utilización de un viejo ardid políticamente aceptado  en las provincias del Noroeste Argentino (NOA): encerrar a los naturales  del lugar en un estadio de fútbol y retenerles   sus documentos de identidad  hasta el día posterior a las elecciones.  
Para humanizar la situación les prometen cosas que nunca se habrán de recibir.
El drama  en  el Norte argentino radica es que   cada vez hay   menos   tierras aptas  para los sembradíos tradicionales. La SOJA  las ha vuelto estéril. 
Es muy grande el número de personas que abandona el NOA,  en busca de tierras fértiles  para poder recuperar el sustento y la dignidad.  

FLOR DE CARADURA.  “La AFIP denunció "trabajo ilegal y condiciones laborales infrahumanas" en un campo en La Rioja propiedad del diputado salteño Alfredo Olmedo. Sin embargo, el legislador de “Salta Somos Todos”, negó esas irregularidades a Perfil.com e incluso dijo que "hay maldad" desde el Gobierno por su selectividad en los controles y porque el fisco "reveló datos que no coinciden con las actas que hizo."
Olmedo no se volvió   un próspero empresario vendiendo estampitas en el santuario de la Virgen del Cerro.
Desfachatados. El jueves, mientras la comunidad Qom (toba), La Primavera de Formosa,  cumplía dos meses   de acampe en la Avenida 9 de Julio en reclamo de justicia, tierras, salud y DNI, el ministro del Interior, Florencio Randazzo se reunía con el gobernador de esa provincia, Gildo Insfrán, para lanzar el nuevo DNI. Incluso afirmó a la prensa local que "Insfrán es un muy buen gobernador, con una gran gestión."
Es evidente que el Señor  Randazzo,  no vive en Formosa.

La Mentira es una institución que se ha ramificado en la política argentina: Nadie se pone colorado.

Perfil.com habló con el líder de la comunidad Qom, Félix Díaz, quien dijo que no hubo ningún contacto con ellos tras la reunión entre Ministro y Gobernador: "Para el Estado no existimos. Lanzan el DNI allá pero a nosotros nos tienen indocumentados", afirmó. Explicó, además, que no dejarán la capital federal hasta que obtengan alguna respuesta.
 Por supuesto que los Tobas no necesitan DNI. En las elecciones les falsifican los  documentos y se aseguran un voto   cantado.
No importa matar con tal de sostenerse  en el Poder. Importa el gran quiosco  que sirve a los intereses espurios de los gobernantes y sus aliados.
Aquí, la Justicia y  la Opinión Pública no existen. Ambas son parte de una entelequia que muere en un  discurso que nadie oye y, menos aún, escucha.
 Pobre iluso de mí, si pienso que algo puede cambiar en este país.
Con seguridad tendré más chance que me escuche el Muro de los Lamentos que los habitantes de la Casa Rosada.



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