miércoles, 7 de agosto de 2013

¡IMBECILES! LA ARQUEOLOGÍA NO MIENTE.

No me importa insistir. Alguna vez hay que terminar con el relato malicioso de que el pueblo hebreo es un INTRUSO en Tierra Santa. La arqueología sigue dando pruebas fehacientes de la existencia del pueblo de Israel en lo que eran los reinos de Samaria y Yehudá los mismos que después de la invasión romana, se los denominó caprichosamente Palestina. Un grupo de arqueólogos descubrió un palacio que podría ser la ciudad israelí de Shaarayim, donde según la Biblia EL REY DAVID peleó contra el gigante GOLIAT en el siglo X adC. El descubrimiento fue hecho por miembros de la Universidad Hebrea y de la Autoridad Israelí de Antigüedades. Según el diario inglés Daily Mail, el palacio que encontraron está a treinta kilómetros al Suroeste de Jerusalém y tiene unos mil metros cuadrados. Los arqueólogos dicen que los edificios son los más grandes conocidos al momento de la época del rey David. La pared que rodea AL PALACIO mide unos treinta metros de largo y un acceso impresionante está montado para descender a la puerta del sur de la ciudad, del lado contrario del Valle de Elah. "Alrededor del perímetro del palacio encontramos cuartos con instalaciones que son evidencia de industria metalúrgica y artesanías provenientes de Egipto”, describen los arqueólogos. GOLIAT, de acuerdo con la narración bíblica, fue un soldado-gigante de la ciudad de Gat y paladín del ejército filisteo, que durante cuarenta días asedió a los ejércitos de Israel. UN POCO DE MEMORIA. Según se cuenta en la Biblia, GOLIAT fue derrotado y herido por David con una honda y una piedra y murió decapitado por su propia espada. Goliat era extraordinariamente alto para la media incluso para los estándares actuales, pues medía dos metros noventa centímetros. Su cota de malla de cobre pesaba siete quilos y la hoja de hierro de su lanza pesaba cincuenta y siete kilos. No mucho tiempo después el profeta Samuel ungió a David rey de Israel, destronando a SAÚL, que era un gran tipo sumamente democrático, que se oponía tenazmente a los tejes y manejes del Rabinato. Y así le fue, lamentablemente. Ya en aquellos tiempos los sacerdotes hebreos tenían una enorme influencia, que la han extendido hasta el presente, donde son parte fundamental para la estabilidad de cualquier Gobierno, no importa su signo político. La Vida es una Fotocopia.

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