Yo en la primaria tenía
un compañero correntino, Rodolfo Móttola, eximio ejecutante de la acordeón a piano y gran animador de todos los
actos de la Escuela Normal de Concordia.
Era correntino y había
llegado a la ciudad por un traslado
de su padre, peronista de ley, para hacerse cargo de la Aduana.
Nuestra gran amistad
hizo que varias veces lo
acompañara a la plaza San Martin, para escuchar, parlante mediante, al General, los 17 de Octubre, lo que se conocía
como el Día de la Lealtad Popular.
Yo no era muy piola que digamos, pero me sentía
más cerca de Evita que de su esposo. Aparte la había conocido dos años antes de
su fallecimiento.
No digo que Perón era un
antisemita, pero los nazis nunca le produjeron alergia.
En junio de 1955, se
había producido un levantamiento de un sector de la Marina, cuyos aviones
habían bombardeado Plaza de Mayo.
Sin Evita, Juan Domingo
ya no era el mismo. Se había cargado a su cuñado Juan Duarte, y se había
enfrentado con la Iglesia Católica, que era lo mismo que comprarse un pasaje al
infierno. El final estaba anunciado.
UN VECINO AMENAZADOR. La
falta de información el único camino que había era escuchar radios uruguayas.
MI PADRE, se olvidó que no se podía hacer nada que enojara a algún vecino
peronista. Y así: no se dio cuenta que
la radio estaba a todo volumen, cuando desde el paredón que nos separaba, el
Ferroviario decidió descargar toda su basura
en nuestro patio.
******
Después de la caída de
Perón, la gente se agolpó a orillas del
Uruguay, para saludarse con charruas y exiliados, en un festejo incontenible.
*******
Pasado un tiempo el
Ferroviario de la Basura, se amigó con nuestra familia, lamentándose la
indiferencia de la gente que no salió a defender al General.
-*******
LAMENTABLE…Perón jugó un
juego perverso desde el exilio, propio de un garca, impidiendo cualquier intento de democratizar
el país.
Y LAMENTABLE, el
accionar de la dupla Aramburu y Rojas, que mostraron el lado oscuro que puede
ostentar el milico. Pretendieron ridiculizar al expresidente, quedando
atrapados en su propia vaguedad para gobernar el país. Inclusive quitaron del
medio al fallecido general Lonardi, porque era un hombre que quería que el país
recuperara sus valores democráticos.
*****
En 1930 el país entró en
un cono de sombra. Unos cuartos de siglo después surgieron las fuerzas del mal,
con un único objetivo: el de satisfacer sus propios egos, sin importarles sus
consecuencias.
Subsisten hasta hoy en día-
Yo en la primaria tenía
un compañero correntino, Rodolfo Móttola, eximio ejecutante de la acordeón a piano y gran animador de todos los
actos de la Escuela Normal de Concordia.
Era correntino y había
llegado a la ciudad por un traslado
de su padre, peronista de ley, para hacerse cargo de la Aduana.
Nuestra gran amistad
hizo que varias veces lo
acompañara a la plaza San Martin, para escuchar, parlante mediante, al General, los 17 de Octubre, lo que se conocía
como el Día de la Lealtad Popular.
Yo no era muy piola que digamos, pero me sentía
más cerca de Evita que de su esposo. Aparte la había conocido dos años antes de
su fallecimiento.
No digo que Perón era un
antisemita, pero los nazis nunca le produjeron alergia.
En junio de 1955, se
había producido un levantamiento de un sector de la Marina, cuyos aviones
habían bombardeado Plaza de Mayo.
Sin Evita, Juan Domingo
ya no era el mismo. Se había cargado a su cuñado Juan Duarte, y se había
enfrentado con la Iglesia Católica, que era lo mismo que comprarse un pasaje al
infierno. El final estaba anunciado.
UN VECINO AMENAZADOR. La
falta de información el único camino que había era escuchar radios uruguayas.
MI PADRE, se olvidó que no se podía hacer nada que enojara a algún vecino
peronista. Y así: no se dio cuenta que
la radio estaba a todo volumen, cuando desde el paredón que nos separaba, el
Ferroviario decidió descargar toda su basura
en nuestro patio.
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Después de la caída de
Perón, la gente se agolpó a orillas del
Uruguay, para saludarse con charruas y exiliados, en un festejo incontenible.
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Pasado un tiempo el
Ferroviario de la Basura, se amigó con nuestra familia, lamentándose la
indiferencia de la gente que no salió a defender al General.
-*******
LAMENTABLE…Perón jugó un
juego perverso desde el exilio, propio de un garca, impidiendo cualquier intento de democratizar
el país.
Y LAMENTABLE, el
accionar de la dupla Aramburu y Rojas, que mostraron el lado oscuro que puede
ostentar el milico. Pretendieron ridiculizar al expresidente, quedando
atrapados en su propia vaguedad para gobernar el país. Inclusive quitaron del
medio al fallecido general Lonardi, porque era un hombre que quería que el país
recuperara sus valores democráticos.
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En 1930 el país entró en
un cono de sombra. Unos cuartos de siglo después surgieron las fuerzas del mal,
con un único objetivo: el de satisfacer sus propios egos, sin importarles sus
consecuencias.
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