Aclarando ideas, no
apto para quienes nos odian
Único en su universalidad, intensidad, longevidad e
irracionalidad, ¿cuál es la raíz del antisemitismo?
La
historia provee demasiados ejemplos de la inhumanidad del hombre para con el
hombre: injusticia social, opresión religiosa, conflictos culturales, guerras
ideológicas, odio entre clases, y casi todo tipo de racismo e intolerancia.
Sin embargo,
una forma particular se destaca por sobre todas las otras: el ANTISEMITISMO.
Único en su universalidad, intensidad, longevidad e irracionalidad, el
antisemitismo es un fenómeno histórico que se sale de los límites sociológicos
normales.
EN 1987, EL
PRESIDENTE DE ISRAEL JAÍM HERZOG COMISIONÓ UN COLOQUIO SOBRE ANTISEMITISMO. EL
PROFESOR MICHAEL CURTIS DE LA RUTGERS UNIVERSITY HABLÓ ALLÍ SOBRE LA
IRRACIONALIDAD DEL ANTISEMITISMO:
“La singularidad del antisemitismo yace en el hecho de que ningún otro
pueblo del mundo ha sido culpado simultáneamente con aislamiento de la sociedad
y con cosmopolitismo, con ser explotadores capitalistas y también con ser
defensores del comunismo revolucionario. Los judíos fueron acusados de tener
una mentalidad totalitaria, al mismo tiempo que son el pueblo del libro. Son
acusados de ser agresores militantes, al mismo tiempo que son pacifistas
cobardes. Son acusados por ser el pueblo elegido, y también por tener una
naturaleza humana inferior. Por arrogancia y también por timidez. Por
individualismo extremo y también por adherencia comunitaria. Por ser culpables
de la crucifixión de Jesús y al mismo tiempo por ser responsables de la
invención del cristianismo”.
COMO EL
HISTORIADOR MARTIN GILBERT OBSERVA EN EL ATLAS DE LA HISTORIA JUDÍA:
“A medida que mi investigación sobre la historia judía progresaba, yo
estaba sorprendido, deprimido y hasta cierto punto pasmado por la violencia
perpetua e irracional que persiguió a los judíos en todos los países y en casi
todos los rincones del mundo. Por lo tanto, si estas páginas están llenas de
persecución, expulsión, tortura, humillación y asesinato en masa, es porque
también lo está la historia judía”.
LO QUE NOS
DEJA CON UNA PREGUNTA: ¿CUÁL ES LA RAÍZ DEL ANTISEMITISMO?
“LOS
JUDÍOS SON RICOS, PODEROSOS, Y CONTROLAN EL MUNDO”.
Muchos
afirman que el antisemitismo es una reacción al poder político y económico de
los judíos. Considera por ejemplo “Los Protocolos de los Sabios de Sión”, un
libro inventado por la policía secreta rusa, pretendiendo ser las discusiones
de los ancianos judíos complotando apoderarse del mundo durante la época de
1920. En los Estados unidos, Henry Ford patrocinó su publicación. Desde ese
momento ha sido impreso internacionalmente en varios idiomas, y actualmente
tiene amplia distribución en Japón.
¿Pero pueden
la riqueza y el poder de los judíos ser realmente la causa del antisemitismo?
Los judíos de Polonia y Rusia (entre los siglos XVII y XX) eran pobres y no
tenían poder. Y sin embargo fueron perseguidos. Los cosacos no verificaron las
cuentas bancarias antes de iniciar los pogromos. Cuando los nazis liquidaron el
Gueto de Varsovia, los judíos vivían allí en una pobreza extrema. La realidad
es que los judíos pobres han sido tan odiados como los ricos.
Mientras los judíos eran asesinados en
masa, la afirmación de que los judíos controlan a los gobiernos se convirtió
dolorosamente en una afirmación absurda.
Más aún, si
es verdad que los judíos controlan los gobiernos, ¿entonces por qué ningún país
aceptó a los refugiados judíos luchando por escapar de Europa durante el
Holocausto? Seguramente con toda su riqueza y poder político, ¡al menos un
gobierno debería haberlos admitido! Cuando todos los gobiernos enterraron la
cabeza bajo la arena mientras los judíos eran asesinados en masa, la afirmación
de que los judíos controlan a los gobiernos se convirtió dolorosamente en una
afirmación absurda.
El “éxito”
judío puede hacer que un antisemita haga rechinar sus dientes, pero claramente
esa no es la causa del antisemitismo.
“LOS
JUDÍOS AFIRMAN SER EL PUEBLO ELEGIDO”.
La
Universidad de California en Berkeley realizó una encuesta, preguntándole a un
grupo de norteamericanos no judíos si creían en una serie de declaraciones
negativas sobre los judíos. Por lejos, la creencia más popular (59% de los
encuestados) era que los judíos se consideran a sí mismos como el pueblo
elegido por Dios.
Es verdad
que los judíos siempre han afirmado ser diferentes. Durante toda la historia
los judíos no han tenido mucho trato con nadie, no socializaron con los
no-judíos, y han tenido un sistema social, cultural y ético completamente
diferente – incluyendo vestimenta, leyes y lenguaje diferente. Superando todo
esto, la lealtad judía nunca fue principalmente hacia los países en los que
vivían. Los judíos siempre soñaron con volver a Sión. Eran los supremos
forasteros.
Si los
antisemitas odian a los judíos porque afirman ser elegidos, ¿entonces qué pasa
cuando los judíos rechazan esta idea? Cuando el Iluminismo llegó a Europa,
muchos judíos dijeron: “¡Ahora es nuestra oportunidad!”. Arrojaron sus
vestimentas extrañas, afeitaron sus barbas, se inscribieron en universidades y
se casaron con gente de otras religiones. En Alemania y Austria, los judíos
dijeron por primera vez: “Ya no somos elegidos. Vamos a ser como ustedes.
Nuestro hogar es aquí. Berlín es nuestro Jerusalem”. Después de siglos de odio,
los judíos esperaban de sus vecinos gentiles una cálida bienvenida.
Sin embargo,
¿en dónde vemos la mayor proliferación de antisemitismo? Precisamente en
Alemania y en Austria – ¡en el momento y lugar en que los judíos dejaron de
lado la afirmación de ser el pueblo elegido!
Si la
elegibilidad es, de hecho, la explicación real del antisemitismo, entonces
muchos pueblos deberían ser odiados por reclamos de elegibilidad similares. Los
norteamericanos tienen el concepto del Destino Manifiesto – es decir, que fue
la voluntad Divina anexar territorio desde el Atlántico hasta el Pacifico. El
nombre China significa “centro del universo”. El nombre Japón significa “el sol
brilla para ellos”. ¡Pero nadie los odia por eso!
Otras
razones han sido sugeridas para el antisemitismo, pero también son deficientes.
Algunos dicen que el odio hacia los judíos surge de ser diferentes o de ser forasteros,
pero como hemos visto, incluso cuando los judíos fueron tan alemanes como los
alemanes, el antisemitismo no disminuyó (usualmente ocurrió lo opuesto). Otros
dicen que los judíos fueron un conveniente chivo expiatorio – pero el odio debe
existir como una precondición para ser elegidos como tales (es decir, nunca
nadie eligió a los enanos como chivos expiatorios para los problemas de un
país).
Otros
sugieren que el antisemitismo existe porque los judíos mataron a su Dios. Pero
los historiadores muestran que el antisemitismo existió mucho antes que el
cristianismo, y ha aparecido en innumerables países no cristianos.
Entonces
podemos ver que todas las ‘razones’ declaradas no son razones para nada, sino
excusas para el antisemitismo. ¿Cuál es la razón real?
EL
INTENTO DE DES-JUDAIZAR EL ANTISEMITISMO.
Ana Frank
escribió en su diario, el 11 de abril de 1944:
“¿Quién nos ha hecho a los judíos diferentes de todos los demás
pueblos? ¿Quién nos ha permitido sufrir tan terriblemente hasta ahora? Es Dios
quien nos hizo como somos, pero también será Dios quien nos eleve nuevamente. Quién sabe, incluso puede que sea por nuestra religión, a partir de la
cual el mundo y todos los pueblos aprenden el bien, y que exclusivamente por
esa razón es que sufrimos ahora.Nunca podremos ser simplemente
holandeses, o ingleses, o representantes de ningún país. Siempre seremos
judíos”.
Ana Frank
dijo que, de hecho, los judíos tienen algo especial que contribuir al mundo – y
es por eso que han sido perseguidos.
Pero en
general, el mundo prefiere des-judaizar el antisemitismo. Cuando el diario de
Ana Frank fue adaptado a una obra de Broadway, escuchamos su explicación del
antisemitismo bastante diferente:
¿Por qué son odiados los judíos?” pregunta, “Bueno, un día es un grupo, y al otro día otro…”
En otras
palabras, las razones del antisemitismo no tienen nada que ver con ser judío.
Los judíos atravesaron un Holocausto, el intento más sistemático de la historia
de la humanidad de asesinar a un pueblo – y no fue por razones judías. Mala
suerte. Estábamos simplemente en el lugar equivocado en el momento equivocado.
LA
RAZÓN DE HITLER PARA EL ANTISEMITISMO.
Sin embargo,
hubo un individuo que declaró abiertamente que el odio a los judíos es porque
hay algo único en ellos: ese individuo fue Adolf Hitler.
Su ambición
era distanciar al mundo del monoteísmo y traerlo nuevamente al paganismo. Apoyó
la superioridad de la raza aria: “El uso del poder… la supervivencia del más
apto… eliminar a los débiles y a los minusválidos”.
Sólo había
un obstáculo en el camino de Hitler: Los judíos. Hitler sabía que fueron los
judíos quienes introdujeron las ideas de amar al prójimo, ayudar al pobre y al
enfermo, y de que todos los hombres son creados iguales. Hitler odiaba el
mensaje de los judíos porque contradecía totalmente lo que él quería.
COMO LO DIJO
HITLER:
“La providencia ha ordenado que yo sea el más grande liberador de la
humanidad. Estoy liberando al hombre de las ataduras de una inteligencia que se
ha hecho cargo, de las sucias y degradantes auto mortificaciones de una falsa
visión llamada conciencia y moralidad, y de las demandas de una libertad y de
una independencia personal que sólo unos pocos pueden tolerar”.
Y “LOS DIEZ MANDAMIENTOS HAN PERDIDO SU
VALIDEZ. LA CONCIENCIA ES UNA INVENCIÓN JUDÍA; ES UN DEFECTO COMO LA
CIRCUNCISIÓN”.
El
antisemitismo de Hitler no era un medio para un fin. Era su objetivo. Mucho
después de que las Leyes de Núremberg de 1935 habían desmantelado efectivamente
a la comunidad judía de Alemania, Hitler todavía no estaba satisfecho. En 1942,
en la conferencia de Wansee, Hitler lanzó la “Solución final” de genocidio.
EL ANTISEMITISMO DE HITLER NO ERA UN
MEDIO PARA UN FIN. ERA SU OBJETIVO.
Luego, con
la invasión nazi a Hungría en 1944, los más altos oficiales militares alemanes
decidieron que las vías del tren debían ser utilizadas para transportar tropas
vitales y equipos al frente de batalla. La Wehrmajt urgió a Hitler a proveer
esta infusión de provisiones que se necesitaban con desesperación. Ignorando
sus advertencias, Hitler dio órdenes de destinar las preciosas vías del tren a
deportar en masa a cientos de miles de judíos húngaros a los campos de
exterminio. Los historiadores reconocen que esta decisión fue un factor clave
para debilitar más aún el esfuerzo de guerra alemán. Parecía que Hitler
consideraba el hecho de matar a los judíos más importante aún que ganar la
Segunda Guerra Mundial.
Dijo: “Si un solo país, por la razón que sea,
tolera una familia judía en él, esa familia se convertirá en el centro de
germinación para un nuevo levantamiento. Aún si sobrevive un pequeño niño
judío, sin ninguna educación, sin una sinagoga y sin una escuela hebrea; está
en su alma”.
LA
VISIÓN DE LA TORÁ DEL ANTISEMITISMO
La Torá
misma enseña que el antisemitismo existirá y que los judíos serán odiados
precisamente por las razones que hicieron eco en las palabras de Hitler.
El Talmud
(Shabat 69) declara: “¿Por qué la Torá
fue dada en una montaña llamada Sinaí? Porque la “siná”, el gran odio al judío, emana de Sinaí” (Siná, la palabra hebrea para odio, es pronunciada casi
idénticamente que Sinaí).
Antes de que
la Torá fuera entregada, la gente construyó sus vidas en base a un concepto
subjetivo del bien y del mal. En Sinaí se le dijo al pueblo judío que hay un
Dios para toda la humanidad que les hace demandas morales a los seres humanos.
No puedes simplemente vivir como te plazca; hay una autoridad superior.
ES POR ESO QUE LOS RUSOS FUERON
AMENAZADOS POR UN PUÑADO DE JUDÍOS QUE QUERÍAN ESTUDIAR HEBREO.
A los judíos
se les dio la responsabilidad de representar esa moralidad y de ser una luz
para las naciones. Entonces, a pesar del hecho de que nunca fueron más que una
pequeña fracción de la población mundial, las ideas judías se convirtieron en
la base del mundo civilizado. Y con eso, se convirtieron en un pararrayos para
quienes se opusieron al mensaje moral. Es por eso que los rusos, aunque eran
una superpotencia en los 70s, fueron amenazados por un puñado de judíos que
querían estudiar hebreo.
¿POR QUÉ LA
GENTE ODIA EL MENSAJE JUDÍO?
Considera
las palabras de Aldous Huxley, en su libro “Confesiones de un Ateo”:
“Tuve motivos para no querer que el mundo tuviera significado;
consecuentemente, asumí que no lo tenía y pude sin ninguna dificultad encontrar
razones satisfactorias para esta asunción. Para mí, al igual que para la
mayoría de mis contemporáneos, la filosofía de la ausencia de significado era
esencialmente un elemento de liberación. La liberación que deseábamos era
simultáneamente liberación de un cierto sistema político y económico y
liberación de un cierto sistema de moralidad. Nos oponíamos a la moralidad
porque interfería con nuestra libertad sexual”.
Para quien
rechaza la moralidad y la conciencia, la única manera de deshacerse del mensaje
es… destruir al mensajero.
¿POR
QUÉ SER JUDÍO?
La solución
para detener el antisemitismo es la otra cara de la causa. Los valores judíos
son la causa del antisemitismo, y los valores judíos son la solución. Sólo
estudiando Torá –y enseñándosela a otros— podemos tener alguna esperanza de
conducir al mundo a un punto en el que el mal será erradicado.
Cuando los
seres humanos abracen la doctrina moral que el judaísmo presentó al mundo –que
hay un Dios que exige un comportamiento ético a todo ser humano– entonces no
habrá más Holocaustos.
Y esa es la
exquisita ironía de la historia judía.
·
El
mundo no puede recibir el mensaje a menos que los mensajeros lo aprendan y lo
enseñen. El mundo necesita el mensaje judío desesperadamente. Ahora ve y
estudia
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